piezas líticas pulidas - Museo Arqueolóxico Provincial de Ourense
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1. H Obermaier Grad F L pez Cuevillas X Lorenzo Xocas y F Bouza Brey Las piezas la m moa la exploraci n del ingeniero y los hallazgos Las tres piezas seleccionadas son l ticas y guardan un destacado v nculo con los trabajos de la t cnica de pulido de la piedra Se trata de un hacha de una probable gubia y de un posible pulidor Las dos primeras piezas fueron registradas en la segunda de las m moas abiertas por M D ez Sanjurjo en el quil metro 24 2 de la antigua carretera de Ribadavia Cea La m moa estaba situada a 30 m del trazado de la carretera y no lejos de otra medorra en la que no se habr an registrado materiales La bibliograf a consultada indica que la intervenci n en este monumento se habr a concentrado en el interior de la c mara sepulcral o anta y en la masa de tierra que formaba el t mulo En el interior de la anta solo se hallaron restos de cer mica decorada carbones y barro cocido pero en la masa tumular fueron registrados el hacha la probable gubia y otras piezas l ticas talladas donadas al Museo en 1901 En el caso del posible pulidor donado al Museo en 1902 ninguno de los investigadores que lo trataron fue capaz de especificar la localizaci n exacta de su descubrimiento de hecho se remiten a la cita inicial de A V zquez N ez en el BCPMHA de Ourense en Marzo Abril de 1902 que sit a el hallazgo en el contexto de las 60 m moas exploradas por el ingeniero Las2. Las tres piezas ser an representativas de los per odos m s recientes de la Prehistoria el Neol tico y el Calcol tico Esta fue una etapa de transici n clim tica global denominada paleoambientalmente como Subboreal y que se resume en una serie de cambios ambientales que provocaron la moderaci n de las condiciones atmosf ricas haci ndose m s c lidas y h medas y la transformaci n progresiva de la cubierta vegetal esteparia en una frondosa vegetaci n de bosque Este proceso natural se detecta en el registro arqueol gico paleoambiental junto con mudanzas de las estructuras de trabajo y sociedad hacia formas m s complejas de adaptaci n a los cambios en el medio con el inicio de la producci n de alimentos y conllevando una progresiva sedentarizaci n de los grupos humanos El nombre del principal per odo proviene de la utilizaci n masiva de una nueva t cnica de fabricaci n de utensilios l ticos el pulido el Neol tico del griego v oc n os nuevo A doc l thos piedra as como de un nuevo empleo de materias primas rocosas Esta t cnica responder a las necesidades de los incipientes modos de vida que motivaban la apertura de claros en los bosques por medio de las rozas y de la quema de vegetaci n de donde se experimentar n los primeros cultivos y el pastoreo domesticaci n para complementar la dieta diaria Metamorfosis l tica o como transformar una roca en un artefacto pulido y con filo En el caso de la probabl
3. las materias primas as como encontrar un elemento imprescindible la superficie de abrasi n es decir el equivalente al pie del molino navicular el pulidor En este punto entrar a en juego un presumible indicio en este sentido el posible pulidor gran tico registrado durante las exploraciones del Ing D ez Sanjurjo Un elemento final en la funcionalidad de las hachas es el mango Este instrumento alargado hecho en materiales resistentes flexibles madera hueso asta y con funci n de astil se colocaba perpendicularmente a la l mina del hacha pulida proporcionando mayor eficacia en el movimiento mec nico de percusi n lineal lanzada En el caso del hacha que se presenta la diferente morfolog a de las caras podr a estar en relaci n con la ergonom a de este enmangado MUSEO ARQUEOL XICO PROVINCIAL DE OURENSE http www musarqourense xunta es PIEZA DEL MES Junio 2013 Xerm n Darriba Barba Las piezas la conservaci n hist rica y la perdurabilidad etnogr fica En el estado actual de la investigaci n poco m s se puede decir de la industria l tica pulida en Galicia salvo algunos avances en relaci n con las tipolog as descriptivas posibles cronolog as an lisis de superficies y de probables or genes de las materias primas La bibliograf a sobre los posibles pulidores y la producci n a nivel local tambi n es escasa Por esta raz n trataremos otras reas de estudio de fuera de Galicia que s ti
4. piezas descripci n La morfolog a general del hacha es trapezoidal Fig Se trata de un til de desarrollo longitudinal con secciones laterales rectangulares caras convexas lados rectos y aristas convergentes con tendencia rectil nea El filo es convexo asim trico con una de las caras m s curvada mientras que la silueta del tal n es irregular a causa de su truncamiento En las caras de la pieza se observan dos suaves rebajes concoidales intencionales que se orientan en paralelo al eje de la pieza hasta alcanzar la zona medial con el objetico de facilitar el enmangue La superficie pulida muestra alteraciones derivadas del proceso de elaboraci n de la pieza o de la manipulaci n postdeposicional con un acabado m s grosero donde se observa la textura fibrosa con colores de tonalidades oscuras azulinas grises y marrones de la materia prima La gubia es un til de desarrollo longitudinal cuya morfolog a general Fig muestra una silueta fusiforme de aristas paralelas curvas y destaca la zona activa con un filo convexo sim trico y ahuecado que la clasificar a en el tipo gubia En el otro extremo el proximal a pesar de la secci n parcial del tal n tiene tendencia a ser apuntado La superficie es opaca con pulido de extensi n muy 4 AS Lu mn A Uno de los significantes asignados tradicionalmente en Galicia a la c mara sepulcral de las m moas MUSEO ARQUEOL XICO PROVINCIAL DE OURENSE http www musarqourens
5. MUSEO ARQUEOL XICO PROVINCIAL DE OURENSE http www musarqourense xunta es PIEZA DEL MES Junio 2013 Xerm n Darriba Barba PIEZAS L TICAS PULIDAS Crouco rapado faime un arado Non fago non que non te o machado V zquez Saco F 2003 En la transici n del siglo XIX al XX 1 M moas cerca Carballi o 2 San Facundo 3 Marti 4 Ba nte 5 Morgade 6 Sta Agueda fue construida la primera carretera entre las localidades de Carballi o y Cea dentro del proyecto de la en el carretera Ribadavia Cea mismo trazado que hasta los a os 90 de municipio fue uni ambas cabeceras Esta obra de arqueol gicas acompa ada unas A A F prospecciones sobreid AO los parciales de municipios de Quio se A O Mandr s ysb L BA Carballi o Cea y Vilamar n en un wentebos Tamoallanco g yz Re 5 a f Garabones O Cornoces S rea de 90 km entre los castros de S Facundo Covas Marti Bainte M moa y rea prospectadas por el ingeniero M D ez Sanjurjo Mana de 1924 Morgade y Sta gueda El trabajo de campo corri a cargo del ingeniero de caminos canales y puertos Manuel D ez Sanjurjo Burgos 1870 Valladolid 1941 con el objetivo de impulsar el estudio de los posibles pobladores antiguos que l denominaba c lticos La productividad de esta prospecci n se plasm en la localizaci n de 60 m moas que se situaban
6. a gran tica presenta un grano fino medio con un grado de alteraci n incipiente y un material que presenta un aspecto decolorado junto con un grado de resistencia algo menor que el de la roca sana Probable gubia posible pulidor y l mina de hacha de izq a der MUSEO ARQUEOL XICO PROVINCIAL DE OURENSE http www musarqourense xunta es PIEZA DEL MES Junio 2013 Xerm n Darriba Barba Las piezas cronolog a tecnolog a uso contextos cultural y ambiental In illo tempore o como datamos las piezas La dataci n de los restos arqueol gicos depende de c mo fueron descubiertos y registrados En el caso de la pieza clasificada como gubia y del hacha fueron encontradas en una m moa pero el contexto arqueol gico del posible pulidor es desconocido Para las dos primeras piezas registradas en la masa tumular existen dos posibilidades o fueron depositadas ex profeso durante las diferentes fases de obra y o uso del monumento funerario o son el resultado del revuelto derivado de excavaciones posteriores a la construcci n en la b squeda por ejemplo del m tico oro de los mouros En el primer supuesto menos frecuente el dep sito del hacha y de la probable gubia abarcar a una antig edad aproximada de 6500 3800 a os V II milenio a C En el caso del pulidor siempre ser a una fecha muy relativa a falta de conocer su contexto exacto y por la falta de ejemplos de este tipo de piezas en Galicia
7. e gubia y del hacha la transformaci n del dise o se consigue aplicando las nuevas t cnicas de picoteado desbaste y acabado con un pulido final abrasivo El pulido se consigue a trav s de la interposici n de un abrasivo arena h meda o agua entre las caras de la preforma y la superficie de gt En aquel tiempo Se usa para referirse a un tiempo pasado y distante Ser legendario de cuya poca d cese son los castros m moas etc como son muchas leyendas de encantamentos y fadas Leandro Carr Alvarellos 1933 Diccionario galego castel n Segunda Ediz n A Coru a MUSEO ARQUEOL XICO PROVINCIAL DE OURENSE http www musarqourense xunta es PIEZA DEL MES Junio 2013 Xerm n Darriba Barba rocas fuertemente granulosas como podr a ser el caso del posible pulidor o porosas produciendo una zona de fricci n La generalizaci n de la t cnica de pulido implicar tambi n un cambio en los criterios de selecci n de las materias primas l ticas porque permite ampliar el repertorio de rocas aprovechables Modo de empleo o para qu pulir una roca hasta obtener un til Los trazos de la modificaci n paulatina del medio que muestra el registro arqueol gico neol tico en Galicia implic una respuesta humana con el objetivo de satisfacer sus necesidades vitales de materias y energ a Con este objetivo y circunstancias se desenvolvi la producci n de una nueva gama de posibles alimentos con remoci n de ti
8. e xunta es PIEZA DEL MES Junio 2013 Xerm n Darriba Barba regular un brillo sedoso una textura fibrosa de colores oscuras gris y marr n y en la que no se evidencia un macrodesgaste por uso o manipulaci n postdeposicional Finalmente s lo a adir que en estas dos piezas la materia prima podr a tratarse de cuarcita grafitosa y la diferente morfolog a de las caras podr a estar en relaci n con la funci n la ergonom a y o su cinem tica El soporte del posible pulidor Fig es un bloque poli drico fracturado en una de sus caras El an lisis morfol gico del bloque distingue una serie de datos geom tricos a los que a adir amos la forma pentagonal irregular de la posible base y la forma subrectangular de las caras laterales para que tengamos una morfolog a general que definir amos como una figura de geometr a prism tica pentagonal e irregular La superficie de la pieza evidencia un acabado grosero heterog neo En este sentido destacar amos los cinco negativos picoteados y muy irregulares de la posible base Mientras que en la cara opuesta destacar amos una subdivisi n diagonal con una cara afectada por una abrasi n homog nea y la concavidad pulida de la otra cara con una morfolog a elipsoide bien delimitada Esta ltima caracter stica morfofuncional y en ausencia de la parte fracturada explicar a la definici n pr ctica de pulidor m vil o exento que le atribuye la bibliograf a Por ltimo la materia prim
9. enen una tradici n en la investigaci n de esta tem tica En el norte de Francia los primeros pulidores fueron inventariados y publicados progresivamente desde finales del siglo XIX con el establecimiento de tipolog as morfodescriptivas y de an lisis petrogr ficos de los tiles pulidos y aplicando metodolog as pioneras provenientes da Gran Breta a En el rea gala existen ejemplos de pulidores registrados arqueol gicamente con datos sobre materias primas canteras y el uso de pulidores fijos y m viles En el centro de Nueva Guinea Occidental la tradici n en la fabricaci n y uso de tiles l ticos pulidos para la tala de rboles perdur hasta 1990 entre las comunidades primitivas de horticultores de este territorio transcontinental Los estudios indican que las hachas y las azuelas jugaban un rol de primer orden en la reproducci n y transmisi n t cnica de su primitiva econom a deforestaci n apertura de claros y tierras de cultivo etc y en su vida social dotes matrimoniales intercambios etc junto con los pulidores fijos y las canteras de materia prima para pulir que se utilizaban a modo de puntos f sicos de referencia en el paisaje para establecer los l mites territoriales entre las tribus Petrequin P Petrequin A M 1993 cologie d un outil La hache de pierre en Irian Jaya Indon sie Ed CNRS pp 397 Par s
10. erras para el cultivo de cereales favoreciendo la proliferaci n de ciertas especies vegetales prader as etc y rboles frutales silvestres avellanos etc para consumo humano directo y el forraje del ganado Esta evoluci n se podr a ejemplificar a trav s de la transformaci n de los cereales En el procesado de los granos de cereal entrar an en juego la trituraci n y la molienda para obtener un formato que favoreciese su almacenaje y consumo Estas t cnicas tienen mucho que ver con el pulido sobre todo en la fase final de la molienda donde participan los molinos m s primitivos los naviformes que est n compuestos por dos partes una pasiva y otra activa El registro en Galicia de la utilizaci n del pulido y del piqueteado en los molinos naviformes neol tico calcol ticos invita a pensar que ya conoc an estas t cnicas Si as fuese y recapitulando tenemos que el registro arqueol gico muestra actividades de deforestaci n que el hacha utilizada en las rozas y la probable gubia usada para tallar tiles en madera fueron descubiertos en el contexto arqueol gico de una m moa y est n hechos en materias primas rocosas locales a trav s de las t cnicas de picoteado y posterior pulido fino Estas evidencias llevar an a suponer la existencia de alg n tipo de producci n l tica pulida aut ctona No obstante cabe ser prudentes al afirmar esta suposici n pues es necesario realizar un an lisis petrogr fico m s minucioso de
11. mayoritariamente en la penillanura donde nace el r o Barbanti o La primera publicaci n de estos hallazgos fue realizada por cuenta de Arturo V zquez N ez Ourense 1852 1907 periodista investigador y amigo del ingeniero y materializada en un art culo del Bolet n n2 20 de la Comisi n Provincial de Monumentos Hist ricos y Art sticos de Orense junio 1901 La prospecci n y la excavaci n resultados V zquez N ez describi los resultados de los trabajos y los hallazgos materiales de las prospecciones y excavaciones arqueol gicas de D ez Sanjurjo como un conocimiento de hito hist rico para el los ajuares funerarios megal ticos de la provincia orensana Tal fue su impacto que desde 1 sp Crouco significa casta a peque a M D ez Sanjurjo 1908 1910 Foto cortes a de la Real Academia Galega 3 p g 911 V zquez Saco F 2003 Refraneiro galego e outros materiais de tradici n oral n m 5 de Cadernos de Fraseolox a Galega Ed Xunta de Galicia pp 1067 Santiago de Compostela htt 3 Uno de los significantes asignados tradicionalmente en Galicia a los monumentos fune www cirp es ub docs cfg05 pdf rarios de la Prehistoria reciente MUSEO ARQUEOL XICO PROVINCIAL DE OURENSE http www musarqourense xunta es PIEZA DEL MES Junio 2013 Xerm n Darriba Barba 1901 ser n citados bibliogr ficamente hasta en catorce ocasiones por autores tan reconocidos como
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